La historia real de la Expedición Franklin


La serie The Terror ha tenido bastante éxito en el canal AMC. Se ha convertido en una de las mejores producciones del último año. Aunque su historia bebe de un libro, el hecho real que le ocurrió a esa expedición británica del siglo XIX sigue siendo todavía un misterio. ¿Qué les pasó realmente en el paso del noroeste Ártico?

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El 25 de marzo pasado se estrenó a nivel mundial una serie muy esperada, en el canal AMC, donde se nos presentaban unos hechos reales convertidos en una serie de Drama. Se trataba de la serie The Terror, considerada la mejor producción del último año y que se ha adaptado de una novela llamada Hyperion de Dan Simmons. Y el éxito de esta serie se ha hecho internacional por esos 10 episodios que ya se emitieron y que no deja de ser una serie histórica pero con un componente paranormal añadido. Lo poco que sabíamos de este producto televisivo era que Ridley Scott estaba como productor, pero ¿Por qué interesó tanto esta historia para ponerse como la máxima cabeza dirigente? Pues una vez más el señor Scott nos demuestra que le gustan las historias estrambóticas, los hechos misteriosos y los seres más repugnantes y aterradores. Hay que recordar quél fue el creador de películas como Alien o Gladiator que no hace falta decir mucho más del éxito que tuvieron. La serie podría llevar perfectamente el subtítulo “La expedición perdida de Franklin”, vamos a adentrarnos en su historia.

La historia de la serie de Ridley Scott se basa en una expedición que realmente se dio por perdida, fue una exploración al Ártico y el capitán de esa expedición fue John Franklin, un veterano oficial de la Armada Británica. Esta misión comienza el 19 de mayo de 1845 y parte desde Inglaterra con dos barcos: The Erebus (capitaneado por James Fitzjames) y The Terror (capitaneado por Francis Crozier); en total casi unos 130 hombres que formaban la tripulación entre las dos embarcaciones. ¿Cuál era el objetivo de esta misión? Atravesar y explorar ese último tramo del paso del noroeste del ártico canadiense que aun estaba inexplorado y los ingleses quisieron ser los primeros. Así que, se supo desde el principio que la expedición iba a ser muy dura por eso llevaron provisiones para tres años (a pesar de que la misión estaba preparada para solo un año), y una inmensa biblioteca de más de mil libros.

La expedición se encontró con un gran problema inesperado, porque aunque sabían que las bajas temperaturas iban a ser constantes y el frío iba a ser protagonista, no vieron venir que sus barcos quedarían atrapados en aquellas aguas congeladas. El estancamiento se produce en el estrecho de Victoria, cerca de la isla del Rey Guillermo.

No sería hasta unos años después (en 1854; aunque ya en 1848 fueron en busca de supervivientes sin ningún éxito) de la partida del Erebus y el Terror cuando un explorador irlandés, Francis McClintock, descubrió los esqueletos de algunos miembros de aquella tripulación por aquella zona donde supuestamente la expedición tuvo que pasar y el misterio de lo que les pasó a aquellos 129 hombres comenzó (al principio iban a ser 134, pero cinco de ellos fueron descartados antes de zarpar; fueron muy afortunados). John Rae, otro explorador, fue quien encontró los restos del capitán Crozier junto a varios cadáveres de otros soldados marineros.

El misterio todavía sigue en el aire pero hace 4 años (en 2014) un grupo de arqueólogos canadienses hicieron un descubrimiento interesante e inesperado, porque esos arqueólogos no estaban buscando precisamente nada sobre esa antigua expedición que partió hace más de 170 años. Los canadienses estaban buscando restos del vuelo MH370 de Malaysian Airlines tan famoso cuando de repente encontraron en un archipiélago del ártico canadiense esqueletos humanos que pudieron pertenecer a la tripulación del Erebus que estaba a 11 metros bajo el agua en el Golfo de la Reina Maud. Y dos años después (2016) descubren el Terror justo cuando la serie estaba ya en preproducción ya que su hallazgo cambió líneas narrativas de la serie. Aquel barco lo encontraron intacto, y con su algunos miembros de su tripulación cuyos cadáveres permanecían congelados y con un gesto de profundo terror, nunca mejor dicho, en sus rostros congelados que jamás verían ese paso del noroeste ártico descubierto ya que no sería hasta principios de siglo XX (1903-1906) cuando el navegante noruego Roald Amunsen lo cruzó sin tener los problemas que tuvieron aquellos más de 100 tripulantes que quedaron sepultados en el hielo como testigos espectrales del poder del Ártico.

 Lo más curioso de aquellos cadáveres es que tenían marcas de cuchillos en los huesos, lo que da a entender que pudieron ser víctimas de canibalismo que es uno de los temas que se expone en la serie y en esta historia de desaparición de barcos.

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Fragmento de la serie.

La serie tiene dos puntos que son asombrosos: la recreación del ambiente gélido e infernal que pudieron vivir aquellos tripulantes y ese componente terrorífico o de ciencia ficción pero que curiosamente si repasáis la mitología de los inuit (conocidos comúnmente como los esquimales) ellos hablan de un ser llamado Tuunbaq que es como un gran depredador capaz de acabar con la vida de los mismos dioses inuit, y el aspecto de ese gran devorador es muy parecida en su descripción al del Oso Polar. Ahí lo dejamos.

Lo curioso de esta serie es que podemos dejarlo como una historia de ficción como muchas que han triunfado cuyo componente principal era el misterio, tipo “Perdidos” o ahora con “The Walking Dead”, pero aquí ese hecho real tiene mucho peso. Es decir, no significa que lo que les pasó a aquellos 129 tripulantes les ocurriera lo que se ve durante los 10 episodios, puso haber sido simplemente un mal cálculo o una enorme ventisca lo que produjera que acabó con ellos y que irían pereciendo con el paso del tiempo al no poder navegar de nuevo. Pero lo importante es ese universo de hipótesis que nos creamos cuando recreamos un lugar que nos parece inhóspito y no sabemos qué es lo que nos puede deparar, con el Ártico y la Antártida nos pasa eso, porque creemos que simplemente son lugares helados donde no hay nada; por eso la visión de Ridley Scott es importante porque igual que creó todo ese universo de Alien también podríamos pensar o especular que lo que nos espera en esos lugares donde el hombre no llega puede ser el peor terror que no esperamos y que no hayamos visto jamás. No tiene por qué ser un monstruo desconocido, muchas veces puede ser otra cosa, pero yo creo que ese Terror está ahí todavía sin descubrir.





 

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