El meteorito Venom de Panamá; La Esfera de Buga y 3/I ATLAS

 En esta sección contamos tres temas que han estado de actualidad:

- Un vídeo viral en TikTok ha mostrado distintas grabaciones extrañas de lo que parecía ser una criatura nacida de un meteorito que un usuario en Panamá se encuentra en su jardín. Al final, y era de esperar, se demostró que todo ha sido un 'fake' bien montado. Pero aun así, hay gente que cree que es una criatura de otro mundo.

- Se ha realizado una datación de la famosa Esfera de Buga, encontrada en Colombia y mostrada al mundo en una masiva rueda de prensa en junio con Jaime Maussan a la cabeza, que le da una antigüedad de más de 12 mil años. Pero el informe de datación tiene bastantes fallos y ha sido muy criticado.

- Y ya por último hablamos de 3I/ATLAS, el nuevo objeto interestelar que ha llamado la atención de toda la comunidad astrofísica. ¿Viajero extraterrestre u objeto extraño?



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A mediados del mes de septiembre (entre los días 14 y 15), un usuario de TikTok con el alias @Kinpanama, se vuelve completamente viral (como suele ocurrir con esta red social en la que cualquier vídeo chorrada o con unas mínimas dotes de edición puedes convertirte en uno de los más vistos o seguidos) cuando muestra un vídeo en el que se encuentra un pequeño meteorito en el jardín de su casa el pasado 29 de agosto de 2025.

En distintos vídeos cortos puede verse como esa roca parece que está compuesta de un metal extraño que cambia de color según la incidencia de la luz del sol. Llega un punto en el que se puede ver como varía al color plateado y el usuario coloca encima las hojas de una planta sobre su superficie que al rato parece que se quedan calcinadas. Y lo que desata definitivamente el asombro de la anomalía de este supuesto hallazgo es cuando de esa roca emerge una especie de organismo vivo como con unos tentáculos y de aspecto viscoso, algo a lo que el mismo emisor de estos vídeos lo bautiza como “Venom”, haciendo alusión al villano simbionte de Spiderman de la franquicia Marvel.



Está creciendo en el meteorito,está creciendo rápido, ya se que está vivo no es mi imaginación,no se alimenta de nada 😰😞esto me está enfermando”, eso es lo que publicó en la descripción de un vídeo de apenas 50 segundos en las que se podía cómo ese ser viscoso estaba saliendo de esa piedra, y para colmo, hasta se movía. Para entonces, lo describía como un ente que no necesita aire ni alimento, crece con rapidez, huele a quemado y, lo más extraño, parece huir de la luz solar.






Algunos biólogos y expertos en micología (rama de la biología que estudia los hongos) han identificado al supuesto ser como un hongo llamado Clathrus archeri, mejor conocido como “los dedos del diablo”. Esta especie de hongo tiene un olor desagradable a carne podrida como forma de esparcir sus esporas. Es originario de Australia.

Aun así, como lo del hongo todavía no ha quedado claro, desde el canal “Biología Cero” sacaron un vídeo dando una explicación viendo los detalles que aparecen en las distintas grabaciones:



Finalmente, el creador de este vídeo creativo confesó que todo era una producción ficticia. Muy bien hecha, pero poca broma con este tipo de cosas porque si hubiera sido un organismo vivo de otro planeta sería muy dudoso que pudiera manipularlo de la manera tan sencilla como él hace en sus vídeos.

La datación imposible de la esfera de Buga

La polémica esfera de Buga, artefacto del que hablamos y que se recuperó en Colombia el mes de marzo pasado, ha vuelto a la actualidad con un informe de datación por radiocarbono realizado por el Dr. Steven Greer, quien es el impulsor de The Disclosure Project (“Proyecto Revelación”), una organización fundada por este ufólogo estadounidense cuyo objetivo es revelar una supuesta conspiración por la que el gobierno de los Estados Unidos habría ocultado datos relacionados con la existencia de ovnis.

El documento, firmado por Alexander Cherkinsky, un investigador con tres décadas de experiencia en análisis de isótopos de la Universidad de Georgia, sitúa la muestra de resina de la esfera de Buga en 12.560 años de antigüedad.

Algunas inconsistencias del informe de datación de la esfera de Buga

De todas maneras, el informe contiene algunas inconsistencias, porque como destaca Josep Guijarro en la actualización que ha hecho en espaciomisterio.com: Químicos han recordado que los adhesivos y resinas modernas no son químicamente “neutros”. Con apenas un 22% de carbono biológico y un 78% sintético, una resina industrial podría arrojar, paradójicamente, una antigüedad de unos 12.500 años.

Aun así, el informe parece mal redactado, con fallos en los datos de análisis, erratas,… En fin, continúa el misterio de cómo ha sido creado y para qué esta esfera. Pero, de momento, la hipótesis extraterrestre no se sostiene.

3I/ATLAS: ¿otra sonda extraterrestre lejana?

El objeto 3I/ATLAS se trata del tercero “viajero interestelar”, desconocido, distinto a cualquier tipo de cometa/asteroide/meteorito que se haya visto hoy en día por su forma, trayectoria y peculiaridades. Tras el cometa Borisov observado en 2019 y 'Oumuamua’ en 2017, este nuevo objeto interestelar ha provocado asombro en la comunidad científica (sobre todo, a través de las investigaciones de Avi Loeb, catedrático de Harvard en astrofísica y cosmología) porque en el próximo mes de octubre va a alcanzar la órbita de Marte.

Y es Avi Loeb, quien se ha convertido en polémico por su teoría de que esto no sería una simple roca vagando por el espacio y viniendo de otra galaxia lejana, sino que ser trataría de “tecnología alienígena” y que “podría estar programada para atacarnos en noviembre”. Y esto lo ha publicado en un informe de 12 páginas haciéndose la pregunta: “¿Es el objeto interestelar 3I/ATLAS tecnología alienígena?”.



La cuestión es que 3I/ATLAS “viaja mucho más rápido” (ya pasó cerca de nuestra órbita de observación) y “su ángulo de entrada al sistema solar es completamente anómalo”. Y como los telescopios todavía observan “menor visibilidad en su entrada”, se piensa que su posición estratégica puede ser de “ataque o vigilancia”.

El artículo publicado en arXiv por Loeb y sus colegas no asegura que se trate de una nave hostil, pero tampoco lo descarta.



 

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