PROGRAMA 4X28 - FÁTIMA 100 años después

100 AÑOS DE FÁTIMA. El misterio de Fátima continúa después de un siglo, la gran pregunta es el por qué se ha mantenido como un lugar de muchas visitas y devoción, ¿cómo se llegó a esa situación? Será algo que contaremos con la inestimable ayuda de historiadores e investigadores como Juan José Sánchez-Oro y Jesús Callejo que nos cuentan con sus palabras el contexto histórico de Fátima, las múltiples manipulaciones y teorías del fenómeno y lo que pudo haber sido en verdad. Repasamos las apariciones originales y debatimos sobre cómo se ve Fátima en la actualidad.

NOTICIAS: Curiosas representaciones pictóricas que representan el antiguo Egipto han sido halladas en una villa de Pompeya; Se crea un exoesqueleto especial para personas de la tercera edad y evitar las caídas que tantas muertes causan en el mundo; China prepara un proyecto de caza de asteroides en 40 años.

ARCHIVO OCULTO: Documentos recientes que han desconcertado a propios y extraños, han salido a la palestra en la cadena norteamericana CBS y de momento no hay pronunciación al respeto. Tienen que ver con Bin Laden, con su legado y con el futuro del terrorismo en el mundo. Un tema de primerísima actualidad y poco comentado.

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Un enorme crucifijo de 34 metros comanda el santuario de Fátima. Lo ves desde la lejanía antes de entrar al lugar. 134 kilómetros separan a ese pequeño pueblo del Distrito de Santarem que alberga el complejo de Fátima de la capital, Lisboa. Pero esa pequeña localidad siempre recordará unos fenómenos extraordinarios que se produjeron hace ya cien años. El hecho ocurriría alrededor de tres niños pastores que cuando los vemos en fotografías vemos claramente la inocencia y la humildad en sus rostros. Lucía, Jacinta y Francisco serían los que contarían un hecho insólito en aquel entonces. Dos seres o entidades luminosas se les aparecieron, el primero descrito con forma de ángel y el segundo como la aparición de una Virgen que les mandaría una serie de mensajes recogidos en lo que se llamó poco después como El Gran Secreto de Fátima o La Revelación. Esa revelación estaría dividida en tres partes como vamos a conocer pero que curiosamente muchas de las profecías que según los testimonios contaron que contenía estaba la conversión de Rusia. Claro, por entonces aquel país considerado de ideología comunista y ateísta era un gran problema en el mundo como también muchos otros que desembocarían en la ya conocida II Guerra Mundial que todavía no había llegado. Es importante que pongamos en contexto socio-político de los acontecimientos que se estaban viviendo por entonces no solo en el mundo sino en la propia Portugal. Era una etapa vital para el ser humano, en la que todavía se estaba en guerra, posteriormente se avecinaría otra así que eran tiempos en los que citar profecías podía pasar que se pusieran de moda. Pero la gran curiosidad de Fátima es que no hubo invención de esos tres pastorcillos, para nada creemos eso y para nada se cree en los muchos estudios y análisis que se han realizado por los expertos pero ya que este asunto ha tenido hasta sus propias historias de manipulación como vamos a escuchar es importante primero que oigamos el contexto histórico, político, económico y social. Era una época de guerra, de hambruna, de mucha enfermedad y con un catolicismo en declive por los gobiernos republicanos, en algo se quería creer, en un milagro que trajese de nuevo la devoción a un pueblo que le costaba sobrevivir al día.

El milagro de Fátima, acontecimiento mundial para toda la prensa.

Una vez entendido el contexto nos vamos a los hechos, pero antes del gran acontecimiento insólito de Cova de Iría los mismos niños ya fueron testigos dos años antes de apariciones similares. Por ejemplo, la pequeña Lucía dos Santos fue testigo en 1915 en dos ocasiones de la aparición de una figura que ella describe posteriormente en sus Memorias como una estatua de nieve (otros la denominan dama de blanco, tan típico en las apariciones marianas) y cuenta que aquella figura se le quedó observando sin apenas decir palabra. Al año siguiente ella misma dejó escrita en aquel libro de Memorias que ya junto a sus primos Francisco y Jacinta Marto pudieron ver la misma visión pero que en esta ocasión aquella figura se les acerca y les da algunos mensajes. Por entonces los tres pequeños escriben aquella aparición con rasgos de una persona joven pero mayor que ellos y de una gran belleza. Estas primeras apariciones son parte de esa primera etapa cuando se contaba que los ángeles a menudo visitaban los lugares de dolor y miseria.

Pero no sería hasta el trece de Mayo de 1917 cuando tendría lugar la primera aparición de la Virgen. Los tres niños, muy pequeños pero ya mayores para poder hacer una labor física, se levantan como de costumbre muy temprano por la mañana y se dirigen los tres que eran inseparables a sacar a su rebaño de más de una centena de ovejas a pastar al campo. Daos cuenta cómo por entonces ofrecer tal cargo de responsabilidad a unos niños era un acto de valentía, ya no sólo el mandárselo sino que los niños se encargaran de ello siendo Lucía un poco la encargada o responsable de ese frágil patrimonio familiar como era ese rebaño de ovejas. Aquellos niños seguían liderando aquel rebaño en pleno campo, alejado de cualquier signo de humanidad y ven en lontananza un rayo luminoso que ellos interpretan como un aviso de tormenta. Pero lo más curioso era que el cielo estaba despejado, ¿qué podía ser? Porque parecía que no era un efecto lumínico del Sol porque poco después otro mismo rayo lumínico, quizás mucho más mayor que el primero surge en el cielo con la incomprensión de los tres infantes que no entendían aquel fenómeno posiblemente, pensaban, meteorológico, ¿qué iban a pensar aquellos tres chiquillos? Hasta que, justo cuando reunían al ganado para marcharse, ven en lo alto de una encina, una simple encina como tenemos en nuestra tierra extremeña y que comparte nuestro país vecino una gran luz que parece materializarse. Aquella luz, de repente, se convierte en una mujer vestida de blanco y con una belleza jamás vista por aquellos pastorcillos. Una “señora de luz” fue como la bautizaron los tres pequeños, con una luz que cegaba. Fue la "aparición perfecta", como bien nos dijo Jesús Callejo en este programa.

Un "ser de luz", interpretado como una Virgen con el tiempo. // reinadelcielo.org

Con esa visión comenzaba la serie de apariciones acreditadas al Secreto o Gran Revelación de Fátima, los días trece de cada mes los videntes recibían una serie de mensajes que finalizarían en Octubre del mismo año. Un total de 7 apariciones en el mismo año que fueron recogidas pero curiosamente aquel primer aspecto visual no se asemejaba al aspecto real de una Virgen como era la de Fátima como se acabó bautizando. Imágenes de este tipo eran muy comunes en esa vieja Europa que todavía estaba en guerra, mucho antes que la que vieron aquella mañana Lucía, Jacinta y Francisco así que,  este no iba ser un caso único pero sí muy representativo. De hecho, apariciones marianas se dieron durante la Primera Guerra Mundial, pero fueron guardados como secreto militar ante el abandono de los soldados por la visión y posterior mensaje de que el conflicto armado acabara pronto. También hay que recordar apariciones previas en el siglo XIX o el famoso caso de la Virgen de Lourdes.

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Nadie de su familia creyeron a aquellos tres muchachos, obviamente la creencia no iba ser automática, y es más, la tortura psicológica y los castigos y encarcelamientos que sufrieron es una cosa que poco se recuerda, pero que en verdad sufrieron. Tuvo que ser con el transcurso del tiempo y con el discurso de aquellos mensajes que les trasladaban las visiones como fueron alimentando el fenómeno que en primer lugar era rechazado por una sociedad que estaba más pendiente del día a día y de que la entonces conocida como Gran Guerra no llegara a sus tierras. La valentía y fuerza de voluntad de los tres pastorcitos fue clave para mantener el Secreto bien vivo a pesar de los numerosos castigos físicos y psicológicos que habían recibido. Una chiquillada pensaban que fuera al principio, producto del aburrimiento de aquellas escapadas con el ganado. Las autoridades civiles y militares impedían a los curiosos acudir al lugar de la supuesta aparición pero al final aquellos niños, sufriendo lo que sufrieron que ya era admirable y que si fuera objeto de una chiquillada obviamente con todo el castigo que pasaron ya lo hubieran reconocido, consiguieron convencer no solo a su familia sino a muchos vecinos y aldeanos cercanos que aunque en un principio las autoridades les impidiesen acercarse a aquel encinar donde se les aparece la extraña silueta, la fuerza de voluntad se impone y la gente empieza a acudir en masa a comprobar qué es lo que había pasado, siempre con los pequeños como guías.

 Después de aquel año histórico, más visiones serían contempladas por los tres protagonistas principales, sobre todo por Jacinta antes de su fallecimiento junto a su hermano Francisco por neumonía y otras por Lucía que incluso estando en España también siguió recibiendo mensajes como vidente que ya estaba consolidada. Mientras tanto, la gente empezaba a acudir a la zona de la aparición milagrosa, no sin antes hacer escala en la donde vivían Francisco y Jacinta en el poblado de Aljustrel para que les guiaran de nuevo al supuesto lugar donde aquella luz se les materializó de aquella forma. Fátima comenzaba a tener importancia, no cayó en el olvido como otras apariciones anteriores, por eso hay un principal factor, muy importante, que Sánchez-Oro nos destaca y que tiene que ver con esa autoridad portuguesa que en un principio era reacia a reconocer el fenómeno pero que ven una cierta relevancia en un fenómeno anómalo alimentado por los milagros posteriores relacionados con aquella primera visión.

El Santuario de Fátima se ha convertido en un parque temático del catolicismo y de la fe.
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Así que una vez establecidas esas apariciones, los relatos de hechos extraños no paraban de producirse. Se contaban fenómenos relacionados con curaciones milagrosas, pasando por alteraciones meteorológicas con el ya conocido “Milagro Solar” (considerado el fenómeno más espectacular producido en Fátima), hasta llegar a ese estado de Clarividencia y Precognición que ya se les acreditaba a los tres chiquillos. Precisamente esos “milagros solares o del Sol” suelen ser un patrón que se repite en muchas apariciones marianas pero en el de Fátima cobró mayor particularidad porque fuera predicho con tres meses de antelación y contemplado por cien mil personas en un radio de 50 km a la redonda. Fue el 13 de Octubre de ese mismo año de 1917, un tiempo lluvioso y tormentoso, digno de un día de otoño puro, pero allí estaban aguantando desde primera hora más de 70 mil personas con más que iban llegando poco a poco a lo largo de la mañana. Cova de Iría era aquel día la capital del misterio, todos congregándose por una misma pasión y deseo de la curiosidad: ver con sus propios ojos un nuevo milagro, conocer un nuevo mensaje. Los niños vivían un tiempo que pasaron del anonimato a ser incluso presionados para forzar las apariciones, algo que mismamente a las familias les preocupaba porque en cualquier momento en que no sucediese absolutamente nada el linchamiento podría estar asegurado ante la frustración de los cientos de miles de congregantes. Pero el milagro se produjo de la nada, era un día tormentoso, completamente nublado, y de repente el Sol se dejaba ver detrás de los oscuros nubarrones brillando con una fuerza nunca antes vista. Con ese brillo, las nubes desaparecían. Un Sol que no hacía daño a la vista según contaban (confirmado por oftalmólogos presentes en la escena) y ese Sol de repente hacía un movimiento extrañísimo, parecía como que giraba sobre sí mismo, como una peonza, que emitía rayos de distintos colores; fenómeno astronómico nunca antes documentado. Aquel hecho exacto creó tremenda convulsión de éxtasis en los presentes hasta el punto de que los alaridos y las llamadas del fin del mundo empezaban a sonar con fuerza. El periodista Avelino de Almeida era uno de los testigos principales de aquella visión, redactor jefe del periódico lisboeta O Século que estaba recogiendo en aquella explanada de Cova de Iría las sensaciones de aquel momento pero que posteriormente sería criticado por alimentar el mito de las apariciones de Fátima. Este hecho fue tachado de fraude con el tiempo, cargando la responsabilidad contra el periodista y los fotógrafos que relataron los hechos para la prensa, ¿cómo puede ser posible que más de 70 mil personas se pusieran de acuerdo en acordar un fraude?

Aquel 13 de Octubre de 1917, miles de personas fueron testigos de algo excepcional y todavía debatido y malinterpretado.


Hay que tener en cuenta que la única aparición con forma humana o parecida a una Virgen fue la de aquel famoso 13 de Mayo, pero los pastorcillos estaban más obsesionados con la aparición de aquel “ser de luz” llamado ángel por ellos mismos en los dos años anteriores al gran fenómeno. Hay muchos estudios interesan que analizan con profundidad y analizan la forma de aquellas primeras manifestaciones cuando se consulta la documentación pero no queremos centrarnos mucho en el cómo sino en el por qué pero sí que me gustaría comentar la comunicación tan especial que había entre la visión y los tres pastores. Parece que no había telepatía como así se ha pensado durante muchos años, sino que eran solo los tres niños videntes los únicos que podían ver y escuchar a la aparición. La principal atracción en todo esto era el poder ver el rayo de luz que previamente se aparecía antes de enviar un mensaje. Curiosamente, uno de los fenómenos más impresionantes ocurre en el mes de Agosto, los niños no estaban, lo que ya hacía presagiar algo malo porque normalmente ellos estaban siempre presentes en aquel recorrido que siempre se hacía con miles de personas detrás a Cova de Iría. Cerca de 20 mil personas acuden en masa aquel día y escuchan un gran ruido en el cielo, como un trueno, y una nube parece descender lentamente sobre aquella pequeña encina lugar de la aparición original. Cuentan que aquella nube se posa en lo alto de esa encina durante unos instantes y comienza posteriormente a elevarse hasta desaparecer. Aquel fenómeno pudo ser visto por esas 20 mil personas, pero los niños no estaban, ya que ese mismo día habían sido secuestrados por el Administrador de Vila Nova de Ourén que les engañó prometiéndoles que les llevaría en un coche de caballos al lugar de las apariciones pero en su detrimento los lleva a su pueblo para interrogarlos. Apariciones de nubes extrañas o bajadas de temperatura repentinas en pleno verano caluroso en el oeste de la península. Apariciones como esa eran muy comunes, incluidas bolas luminosas que cada vez que se aparecían la pequeña Lucía señalaba con el dedo y gritaba “¡Es ella!” “¡Es ella!”.


Las profecías. Quizás la parte que más interesa del fenómeno de Fátima, muchas de ellas cumplidas y otras aún por cumplir dicen. La primera de ellas se cumplió con el fallecimiento de Jacinta y Francisco. Francisco fue el primero, el 4 de abril de 1919 fallece de noche después de haber recibido la extremaunción, una neumonía se lleva al pequeño que ya había afectado a su familia y es que aquella era gripe se llevó muchas vidas ante la falta de recursos médicos. Francisco dijo haber tenido visiones donde ya veía su muerte unos días antes. El mismo y triste final tuvo Jacinta, también con visiones pero aunque se la intentara salvar por todos los medios operándola e ingresándola en varios hospitales, Jacinta sabía que su final iba a ser el mismo que el de Francisco y fallece el 21 de Enero de 1920 en la capital Lisboa, donde ella quiso acabar sus últimos días. En el hospital Doña Estefanía la sometieron a una delicada operación y fue con éxito, porque todos los médicos pensaban que Jacinta de verdad estaba sana pero Jacinta seguía comunicándoles a los médicos que aquella noche de la intervención iba a morir, y ante ese asombro del personal médico y ante la buena salud que parecía tener la pequeña después de aquella intervención, el pronóstico, una vez más, de la pequeña pastorcilla al igual que el de Francisco, se cumple.


En la Tercera Memoria escrita por Lucía en Tuy (Pontevedra) el 21 de Agosto de 1941 dejó escrito Lucía al Obispo de esta forma: “Y no ignoro, señor Obispo, cómo hace algunos años, Dios manifestó esa señal que los astrónomos quisieron designar con el nombre de Aurora Boreal. No sé, pero me parece que si examinan bien verán que, dada la forma en que se presentó, no fue, no podía ser tal aurora. Mas sea lo que quisieren. Dios se sirvió de eso para hacerme entender que su justicia estaba a punto de descargar el golpe sobre las Naciones culpadas”. Una Aurora Boreal, causante del comienzo de la II Guerra Mundial según la vidente Lucía, la única testigo principal que quedaba ya viva del fenómeno de la luz de Fátima. Cuentan que esta fue otra de las profecías cumplidas. ¿Cuál puede ser el principal milagro de Fátima? Quizás el de haberme mantenido durante más de un siglo como un acontecimiento mundial y diario de millones de visitas. Seguirán pasando los años, quizás los siglos, y nos sigamos preguntando, ¿qué pasó realmente en Fátima?

Dos de los pastorcillos tienen su estatua en el complejo de Fátima, fueron los principales testigos, y el secreto se fue con ellos.


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